Vivo en el altillo de mi edificio, comparto mi casa con murciélagos y una perra que está verdaderamente loca, la trato como si fuera mi hija, tomo sol desnuda, paso todo el tiempo desnuda en verdad, a veces mantengo conversaciones en voz alta, conmigo misma, me gusta el vino, las flores, me gustan las personas, todas las personas me gustan, cuando conozco a alguien adivino en secreto su procedencia sociocultural, generalmente acierto, ese es mi pecado, aburridisimo pecado el mio, no me gusta el misterio, y en verdad no tolero estar demasiado tiempo con gente alrededor, intento creer que si, porque no quiero llegar a ser como esas viejas que tienen muchos gatos y y toda la bola, pero para mi es una noche, unos traguitos, reírme hasta que me duela la panza, si, pero un rato, después me empieza a agarrar fobia, extraño mi casa, mi perra, mis murciélagos, la gente puede ser muy idiota, intento racionalizarlo, "no tiene la culpa, es idiota porque los padres deben ser idiotas, se pasó la vida absorbiendo idiotez"... no me sale, la verdad es que todos tenemos personas que piensan que somos unos estúpidos, todos tenemos personas que piensan que somos geniales, supongo que somos ambas cosas, pero por acá todos somos encantadores y la realidad es nuestra hermosa construcción.
(arte arte arte y feminismo cibernético)
(arte arte arte y feminismo cibernético)






