Semana santa, peste, me encuentro en el estado mas miserable de gripe y mocos y tos, y pedazos de papel por toda la casa, y ese olor rancio a enfermedad que me rodea... son la una y ya me bajé los tres tes antigripales (sin contar la olla repleta de fideos 4 quesos que devoré en la cama), salí a la calle con el pelo sucio, cubierta con jeans holgados y un saco de lana gigante y el chal rojo que me tejio la lela alguna vez, la gente me miraba raro, la poca gente que queda en la ciudad, el dia esta nublado, pesado, nostálgico.
Los negocios cerrados, la basura en la calle,y él, que vino y se fue a las 2 horas, es feriado y la sangre corre lento, estuvimos callados todo el tiempo, hablamos, es verdad, pero los dos sabemos que sólo silencio es el que había.
Le propuse ver una pelicula, pero ya era muy tarde, el se fue para dormir, y yo me quede para simplemente existir hasta que Jesus renazca y todo vuelva a la reconfortante normalidad.
